La interpretación en la Comunidad Europea del Carbón y del acero

  1. García Gato, Marta
Dirigida per:
  1. Jesús Baigorri Jalón Director/a

Universitat de defensa: Universidad de Salamanca

Fecha de defensa: 04 de de febrer de 2016

Tribunal:
  1. María Manuela Fernández Sánchez President/a
  2. Icíar Alonso Araguás Secretari/ària
  3. Lucía Ruiz Rosendo Vocal

Tipus: Tesi

Resum

Actualmente (2016) la Unión Europea (UE) cuenta con 28 estados miembros y tiene 24 idiomas oficiales. Este desarrollado sistema de comunicación multilingüe es posible gracias a los Servicios de Traducción e Interpretación de las instituciones europeas. No obstante, la UE no siempre ha tenido tal envergadura. La Declaración Schuman supuso el germen de una Comunidad que buscaba sentar las bases de una nueva manera de tejer relaciones entre países en la que primaba la cooperación. Así comenzó la llamada construcción europea en 1952 con la creación de la CECA (Comunidad Europea del Carbón y del Acero) fundada por seis países (Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos). Dado que tenían cuatro idiomas distintos (alemán, francés, italiano y neerlandés) para establecer unas normas que rigieran poner la producción de carbón y acero bajo la supervisión de un ente común y trazar las bases de un futuro compartido las opciones para entenderse eran dos: aceptar un idioma vehicular o adoptar más de uno, requiriendo por tanto traductores e intérpretes para comunicarse. Este trabajo saca a la luz el funcionamiento del servicio de interpretación de la primera Comunidad Europea multilingüe: la CECA. En aquellos años de posguerra apenas existían aún escuelas especializadas y la interpretación simultánea tenía pocos antecedentes. Sin embargo, la construcción europea prosperó en cuatro idiomas. ¿Cuáles fueron las características de aquel trabajo de interpretación? El presente estudio llena una laguna temática en la historia de la interpretación. La metodología empleada salvaguarda parte de la memoria de algunos pioneros del proyecto europeo. Este trabajo igualmente puede favorecer la comprensión de la existencia y del funcionamiento de la actual UE multilingüe y generar interés sobre la profesión en personas ajenas a la interpretación. La investigación emplea metodología historiográfica tradicional completada con técnicas de la historia del presente. Las fuentes escritas, orales y gráficas que conforman el corpus documental se emplean de manera complementaria. El trabajo muestra las bases del multilingüismo en la CECA, indaga en las necesidades lingüísticas orales y la manera administrativa de cubrirlas, dedica un espacio a los intérpretes, analiza las condiciones de trabajo y explora el progreso tecnológico en el ámbito de la interpretación. La investigación ofrece, además, una visión histórica sobre las primeras prácticas de interpretación en instituciones comunitarias y descubre cómo se fue estableciendo la relación con las universidades. El análisis profundiza en la repercusión que tuvo la Asociación Internacional de Intérpretes de Conferencias (AIIC) en la gestión de intérpretes en la CECA. Se señalan algunos momentos clave de la senda hacia la Comunidad Económica Europea (CEE) en los que participaron intérpretes y se presenta el origen de los servicios de interpretación actuales de las instituciones europeas de la UE; de la Comisión Europea, del Parlamento Europeo y del Tribunal de Justicia. Con esta obra se demuestra que el establecimiento de un servicio de interpretación en la CECA fue, ante todo, un proceso paralelo a la construcción europea e imbricado con ella. Por lo tanto, existe una sólida interdependencia entre el inicio de la construcción europea y las lenguas en las que se cimienta, gracias a los constructores de puentes que son los traductores y los intérpretes.