De los curas-obreros a los obreros-curasEl sacerdote en el trabajo en la diócesis de Cádiz, 1966-1979
- Julio Pérez Serrano Director/a
Universidad de defensa: Universidad de Cádiz
Fecha de defensa: 03 de febrero de 2017
- Marie-Claude Chaput Presidente/a
- Juan Andrade Blanco Secretario/a
- Carmen González Martínez Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
La presente tesis doctoral se acerca al hecho histórico de los curas obreros en las décadas de los sesenta y setenta del siglo XX en la diócesis gaditana para indagar en su misión, que si en un primer momento se planteó como un apostolado obrero cuyos fines eran evangelizar y dar testimonio de fe desde dentro de la clase obrera, terminó derivando en actitudes de promoción de sus trabajadores y de denuncia de las injusticias de las relaciones laborales. Aunque el fenómeno en Cádiz no duró más allá de una generación de sacerdotes, la relación de éstos con la iglesia jerárquica diocesana dibujó un contexto histórico muy rico, ofreciendo continuos encuentros y desencuentros. Las causas se hallaban en el talante reivindicativo del grupo, que les hizo, ya desde su época de seminaristas, liderar y encabezar cualquier acción que significara tanto la democratización y modernización de las propias instituciones eclesiásticas como el acercamiento de éstas al tradicionalmente alejado mundo obrero. La tesis da a conocer el itinerario recorrido por el cura obrero gaditano desde sus primeras experiencias laborales estivales aún como seminarista, donde adquirió simpatía con la clase obrera, hasta su encarnamiento en la misma como trabajador manual, donde consiguió la empatía necesaria con sus compañeros obreros para poder promocionarles en el mundo del trabajo. Solo entonces, sumando a su presencia el sufrir sus injusticias, el cura obrero adquirió la conciencia de clase necesaria para dar el salto al resurgido movimiento obrero circundante y, desde allí, implementar su misión. También se analizan las estrategias que utilizaron para evangelizar a la clase obrera, un concepto de evangelización que iba más allá del mero acercamiento del Evangelio, no suponiendo una suerte de proselitismo o deseo de conversión, sino la invitación a vivir la palabra de Dios interpretada como la mejor forma de luchar por la igualdad de todos los hombres y de defender los derechos de las personas, sobre todo de los más necesitados, que en esas décadas era la clase obrera. Actitudes y acciones que les llevaron, como a todo trabajador implicado en reivindicaciones sociales y laborales, a ser vigilados y perseguidos por la autoridad gubernativa.