Reconversión de ejército rebelde a ejército regular al servicio de república de Cuba- 1956-1970

  1. Silva Ardanuy, Francisco Manuel
Dirigida por:
  1. Juan Marchena Fernández Director

Universidad de defensa: Universidad Pablo de Olavide

Fecha de defensa: 15 de marzo de 2012

Tribunal:
  1. Juan Andreo García Presidente/a
  2. José Luis Belmonte Postigo Secretario
  3. Clelia Martínez Maza Vocal
  4. Juan Manuel Santana Pérez Vocal
  5. Javier Laviña Vocal
Departamento:
  1. Geografía, Historia y Filosofía

Tipo: Tesis

Teseo: 348407 DIALNET

Resumen

La definición del proceso de reconversión del grupo guerrillero, conjunto de ochenta y dos hombres, que zarparon la noche del 24 al 25 de noviembre de 1956 desde Tuxpan (México), a bordo del yate ¿Granma¿ hacia Cuba con el objetivo de derrocar el gobierno militar de Fulgencio Batista, ha de evitar construir una semblanza de dicho periodo de la Historia de Cuba. Explicar los hechos que afectaron al ejercito en Cuba durante este periodo no pretende realizar una semblanza de la Historia de la República de Cuba en esos años, sino entender cómo una estructura combativa formada inicialmente por una jefatura y tres pelotones, compuestos estos a su vez por escuadras, tuvo que asumir a partir del 1 de enero de 1959 y hasta 1965, momento en que las estructuras organizativas y de adiestramiento del ejército cubano quedan consolidadas las funciones propias de un ejército regular. Esta investigación refiere a un proceso de transformación de estructuras político administrativas, donde el hecho bélico (política militar, estrategia, planes operacionales, táctica y acciones combativas) tiene una importancia excepcional, pero no pueden dejar de considerarse factores como el escenario político, económico, social o los antecedentes históricos. Recoger los elementos centrales del proceso vivido por los rebeldes, las estructuras que generaron, la organización de las columnas y frentes rebeldes alzados en las montañas de la Sierra Maestra, hasta la organización del actual Ministerio de las Fuerzas Armadas y la posterior adecuación de las Fuerzas Armadas Cubanas a estructuras protocolizadas bajo el diseño fijado por los acuerdos de los países firmantes del llamado ¿Pacto de Varsovia¿, es el objeto de esta investigación. Por tanto, no se trata de construir la Historia de la República de Cuba entre 1956 y 1970, sino de acercar los hechos que expliquen cómo un grupo de hombres, en su mayoría de origen cubano, consiguieron a pesar de las adversidades de diferente índole, convertirse, en un primer momento, en una unidad guerrillera de vanguardia, que consiguió derrocar el gobierno dictatorial existente en la República de Cuba desde el 10 de marzo de 1952, obteniendo así la completa independencia del país. Como segundo objeto de investigación, el presente trabajo pretende conocer las distintas fases por las que atravesó el Ejército Rebelde; su consolidación, expansión y adecuación al contexto histórico por el que atravesaron los guerrilleros del ¿Movimiento 26 de julio¿; un grupo que, mermado de inicio hasta quedar reducido al número de entre ocho y doce guerrilleros, tuvo que asumir un nuevo tipo de organización a raíz de la oposición presentada por las Fuerzas Armadas Regulares y que tras tres años de acciones combativas, terminaron forzando la marcha de la cúpula militar y del propio dictador Fulgencio Batista, momento a partir del cual tuvo que organizarse en estructuras al uso debido a la precipitación de los acontecimientos históricos que, a partir del 22 de diciembre de 1958 se producirían con el colapso de las Fuerzas Armadas que sostenían la dictadura. Finalmente, y a partir del 1 de enero de 1959 deberían reorganizar su estructura de columnas y frentes, que se nutrían de miembros captados de entre diferentes clases de la sociedad cubana , para que, en el marco de un sistema normativizado y sometido al nuevo ordenamiento jurídico del país, se convirtieran en la Fuerzas Armadas de la República. El período que abarca el presente estudio responde a los momentos determinantes en la génesis de la fuerza rebelde que se constituyó en el exilio y que, guiados por Fidel Castro Ruz, hubo de superar tres fases centrales en su tránsito hasta la asunción de funciones equiparables a las de los ejércitos regulares de América Latina . Los cambios aplicados a partir de 1965, momento en que quedan aprobadas las posiciones de adiestramiento y capacitación, tanto de la estructura de reclutas como de la oficialía del ejército, derivan de los distintos compromisos y experiencias adquiridas por las Fuerzas Armadas Cubanas en sus distintas acciones combativas en defensa de la soberanía nacional. Es necesario señalar que, la presente investigación, refiere a un proceso de transformación de estructuras político-administrativas donde el hecho bélico -política militar, estrategia, planes operacionales, táctica y acciones combativas- tiene una importancia excepcional pero no pueden dejar de considerarse factores consustanciales a los acontecimientos armados, como el escenario político, económico, social o los antecedentes históricos. En la presente obra la unidad de observación principal es el arma de Infantería sin excluir el papel referencial que juegan los demás componentes de las Fuerzas Armadas en Cuba -La Marina de Guerra, la Fuerza Aérea Rebelde o la Policía Nacional en la fase previa a la construcción de las instituciones revolucionarias- haciendo de la lucha armada protagonizada por unidades guerrilleras el factor de análisis de la investigación, entendiendo lucha armada como contenido especifico de la guerra siendo su medio más peculiar de explicitación el combate donde se emplean de manera ordenada fuerzas y medios con el objetivo de asestar la derrota al adversario, para alcanzar los objetivos propuestos. Los compromisos internacionales adquiridos por el gobierno de la República de Cuba en determinados frentes de lucha, así como el asesoramiento militar cubano a las fuerzas rebeldes de Argelia en 1963, Siria en 1973, el compromiso con las fuerzas rebeldes en Etiopia en 1978, el apoyo al Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde (PAIGC) en Guinea-Bissau, la defensa de las posiciones del MPLA (Movimento Popular de Libertação de Angola) en Angola entre 1975 y 1989 o el apoyo logístico brindado al Frente Sandinista de Liberación Nacional de Nicaragua entre 1979 y 1990 contribuyeron igualmente a la consolidación de la capacidad combativa del nuevo Ejército , si bien no es materia de estudio en la presente obra. Durante este período, se produce la aprobación de las nuevas leyes dictadas por parte del Gobierno revolucionario cubano. La llamada ¿Ley Fundamental¿, promulgada el 7 de febrero de 1959, fijará las relaciones en el seno del nuevo Estado cubano hasta que se promulgue la Constitución del 24 de febrero de 1976 . Dicha Constitución es la base organizativa del actual sistema cubano y a la cual se han aplicado diferentes reformas desde entonces. El texto de 1959 regula la fundación de los Ministerios que albergan las competencias en materia de Defensa, así como los instrumentos y organismos de los que se dota el Estado para aplicar sus deberes en materia de seguridad nacional, centros especializados de formación, escuelas de oficiales, organizaciones cívicas para la defensa nacional y estructuras políticas de orientación y dirección de las Fuerzas Armadas. La República de Cuba hubo de enfrentar amenazas de agresión militar desde el inicio de las transformaciones de la estructura del Estado y su nueva orientación política . Para garantizar la seguridad nacional, el país destinó numerosos recursos humanos y materiales para su defensa. La consolidación de un sistema defensivo basado en la regularidad que transformara las estructuras irregulares de defensa que facilitaron el triunfo frente al Ejército al servicio de la Dictadura el primero de enero de 1959 se basa en el firme apoyo mostrado por la población civil de Cuba que asumió la defensa del país como una obligación colectiva y por el apoyo logístico y técnico brindado por la Unión Soviética (URSS) que suministró gran parte de la técnica militar necesaria que la nueva política defensiva cubana demandaba . Esto posibilitó que desde 1961, comenzara un proceso reorganizativo en las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) que las transformó en una fuerza regular que en caso de intervención militar por parte de un tercer Estado o una coalición atacante fuese capaz de ofrecer una fuerte resistencia que se tradujera en un coste humano y material inasumible por los agresores, jugando así las Fuerzas Armadas un papel disuasorio esencial en la defensa de la República de Cuba. Basado en la idea de crear unas fuerzas Armadas regulares con capacidad de contener acciones ofensivas, fue necesario incrementar los efectivos permanentes y prepararlos para el cumplimiento de sus misiones combativas lo que fue posible por la integración del Ejército Rebelde y las Milicias Nacionales Revolucionarias (MNR) en un sólo cuerpo armado regular. Así, el número de combatientes en el servicio militar activo se elevó de 49.015 a mediados de 1960, a 138.132 en diciembre de 1961 con el objetivo de situar el número de efectivos en tiempo de paz en los 98.000 . Como resultado, las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), las tropas terrestres pasaron de una estructura de compañía-batallón a la de división-brigada-ejército, lo cual produjo un cambio cualitativo en la organización militar cubana. Sobre la base de este nuevo concepto organizativo a partir del segundo trimestre de 1961, se crearon tres ejércitos ¿Central, Oriental y Occidental- que tuvieron a su cargo la defensa de la isla en sus tres direcciones estratégicas principales. Ya para el 4 de abril de 1961, cuando aún faltaban días para producirse la acción invasora de la Brigada 2506 en la Bahía de Cochinos, el Alto Mando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias había decidido crear el Ejército Central que estaría al cargo de la defensa de las antiguas provincias de Camagüey, Las Villas y parte de la provincia de Matanzas. El mando del Ejército Central recayó en el Comandante Juan Almeida Bosque siendo designado Jefe de su Estado Mayor el también Comandante Raúl Menéndez Tomassevich . El proceso de organización de sus unidades principales tuvo lugar entre los meses de abril y octubre de 1961. A la jefatura del Ejército central quedaron subordinados las unidades de las Fuerzas Tácticas de Combate del Ejército Rebelde del territorio y los batallones de las Milicias Nacionales Revolucionarias (MNR).A finales de 1961 la estructura orgánica del Ejército del Centro quedaba conformada por trece divisiones de infantería, cuatro batallones independientes y un grupo independiente de artillería antitanque. Junto a ellas, una Jefatura de Cuerpo de Ejército (5º Cuerpo de Ejército) para el mando y dirección de las unidades militares dislocadas en Camagüey. El total de efectivos fueron de 18.693 combatientes en servicio militar activo y alrededor de 29.000 milicianos reservistas. El 21 de abril de 1961, se crea el Ejército Oriental sobre la base de los combatientes del Ejército Rebelde que pertenecían a las Fuerzas Tácticas Orientales y Miembros de las Milicias Nacionales Revolucionarias (MNR), que sería comandado por el Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Raúl Castro Ruz y por Calixto García Martínez como Segundo Jefe del Ejército y Belarmino Castila Mas como Jefe del Estado Mayor del Ejército Oriental. El proceso de organización del Ejército Oriental se produjo hasta finales de 1961 y quedó integrado por doce divisiones de infantería, tres batallones contradesembarco, una brigada de artillería y cinco sectores serranos, que fueron la organización territorial que agrupó en las montañas del Oriente del país a las compañías de milicianos, campesinos y obreros agrícolas de la zona montañosa de Cuba. Como batallones con características específicas adscritos al Ejército Oriental el 9 de noviembre de 1961, se formó el Batallón de Frontera con el objetivo de salvaguardar el área perimetral que rodea a la Base Naval norteamericana de Guantánamo . En 1962, se constituyó una jefatura de cuerpo de Ejército para el mando y dirección de las unidades militares ubicadas en la región norte de la provincia de Oriente. Los efectivos permanentes del Ejército Oriental ascendían a 22.215 combatientes mientras los combatientes reservistas ascendían a 55.000. El mismo día 21 de abril de 1962 se constituye la primera división regular de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) con los combatientes de los diez batallones de las Milicias Nacionales Revolucionarias (MNR) de la provincia de Oriente, que habían participado en la Lucha contra Bandidos (LCB) en la zona montañosa del centro del país. La 50ª División, sería organizada por el capitán Senén Casas Regueiro. El 14 de junio de 1961, se constituyó el Ejército Occidental que abarcaba las provincias de Matanzas, Pinar del Río y La Habana, al tiempo que aseguraba el reforzamiento militar de la Isla de Pinos, para la cual fue creada el 15 de marzo de 1962 una región militar al mando del comandante William Gálvez Rodríguez quién dirigía una agrupación de tropas compuesta por 3.314 efectivos permanentes. Al frente del mismo se situó a Guillermo García Frías y como Jefe del Estado Mayor al comandante Oscar Fernández Mell. Esta unidad mayor contó con 26.164 efectivos permanentes y 85.000 reservistas y abarcó 18 divisiones de infantería, cinco batallones contradesembarco y cinco de aseguramiento así como un grupo independiente de artillería antitanque. E1 4 de agosto y el 30 de septiembre de 1961 respectivamente, fueron firmados dos convenios entre los Gobiernos de la República de Cuba y la Unión Soviética (URSS) mediante los cuales la URSS se comprometía a suministrar equipos y medios bélicos. En el primer convenio, el de 4 de agosto de 1961, la Unión Soviética vendería equipos bélicos por valor de 48.5 millones de dólares, mientras que la cantidad de material suministrado en el segundo convenio suscrito el 30 de septiembre de 1961 ascendía a 149¿55 millones de dólares . Cuba habría de pagar a la Unión Soviética un total de 73¿55 de los 198¿05 millones de dólares por los insumos bélicos en diez años con un interés del 2% anual. Existiría un tercer convenio firmado el 13 de julio de 1962, durante la visita realizada por el Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), Raúl Castro Ruz a Moscú mediante el cual se cancelaban las deudas contraídas por la República de Cuba en los anteriores convenios estableciendo además el abastecimiento de armas y municiones de forma gratuita por un periodo de dos años . El 17 de abril de 1961, surge la Defensa Antiaérea y Fuerza Aérea revolucionaria (DAAFAR) que unificó el mando de la Defensa Antiaérea (DAA), las Tropas Radiotécnicas (TRT) que contaban con dos compañías y la Fuerza Aérea Revolucionaria de la República de Cuba. La DAAFAR contaba para 1961 con 5.464 efectivos permanentes. La Defensa Antiaérea contaba a principios de 1962 con un grupo independiente de artillería antiaérea y 22 baterías más. La Marina de Guerra Revolucionaria (MGR) contaba con 5.000 combatientes para 1962 repartidos en los tres ejércitos del país apoyando su capacidad esencialmente sobre lanchas torpederas y buques caza submarinos. Para 1961, la Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) organizaron importantes unidades de artillería terrestre y una brigada de carros de combate que se subordinaba al Estado Mayor General que formaron en su conjunto, la Reserva del Alto Mando. Para 1963 se planificó la creación como parte de la reserva del Alto Mando, un batallón de carros de combate, tres grupos de lanzacohetes, cinco grupos de morteros y cuarenta baterías antiaéreas. Bajo la dirección del Estado Mayor General se situaron tres batallones de aseguramiento combativo. A mediados de 1962, quedó constituida la Defensa Popular (DP) como un órgano del Ministerio de las Fuerzas Armadas (MINFAR).Sus misiones fueron proteger a la población así como defender los enclaves socioeconómicos estratégicos. La nueva institución armada surgía de las unidades de milicias integradas en la Organización Militar Industrial (OMI), formada por milicianos imprescindibles en la producción y los servicios. El Ministerio de las Fuerzas Armadas (MINFAR) y el Estado Mayor General (EMG) contaban ya en 1961 con una estructura que garantizaba la concentración de todo el trabajo operativo y movilizativo del Estado Mayor General así como la dirección efectiva de la preparación combativa de las tropas. Para el ejercicio 1961, las Fuerzas Armadas Revolucionarias desarrollaron planes para crear nuevas escuelas militares que garantizaran la preparación de jefes e instructores así como oficiales técnicos adaptados al esquema de organización de un ejército regular protocolizado según los parámetros de las Fuerzas Armadas integradas en el Pacto de Varsovia. En este proyecto de creación de escuelas de formación para la suboficialía y oficialía tuvo gran importancia la experiencia de los cursos de responsables de milicias de la Escuela de Oficiales de Matanzas ¿Ignacio Agramonte¿ destinada a la formación de jefes de batallones y pelotones, en cursos de tres y seis meses, respectivamente. El 8 de mayo fue inaugurado el primer curso de la Escuela de Instructores revolucionarios ¿Osvaldo Sánchez Cabrera¿. El 1 de Diciembre de 1961, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, Fidel Castro Ruz emitió la Orden Número 1 en la cual se analizaba el desarrollo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias destacando alguna de las experiencias adquiridas por los Estados Mayores de las unidades para planificar y dirigir la preparación combativa. El 18 de Diciembre de 1961, al valorar los cambios que se operaban en las Fuerzas Armadas Revolucionarias en una alocución a los combatientes de las FAR afirmó: ¿[¿] el pueblo Cubano, comenzó a forjar un ejército moderno, victorioso, con gran espíritu de lucha, dotado de magnífico armamento, con jefes probados, alertas y estudiosos¿. El 1 de junio de 1961, el Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias emitió la Orden Número Dos que preveía la superación de déficits organizativos detectados así como desarrollar un nuevo periodo de instrucción, realización de ejercicios militares tales como maniobras divisionarias en los diferentes ejércitos y una maniobra dirigida por el Estado Mayor General. El 6 de junio de 1961 el Consejo de Ministros aprobó una Ley mediante la cual se disolvía al antiguo Ministerio de Gobernación creando en su lugar el Ministerio del Interior (MININT) adscribiendo a éste el Departamento de Información (G-2), la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y la Policía Marítima que hasta ese momento estaba subordinada al Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (MINFAR). Al frente de este nuevo organismo del Estado fue designado mediante el Decreto Presidencial número 3.007, el Comandante Ramiro Valdés Menéndez . Más allá del período 1956-1965 encontramos cambios sobre los elementos ya aprobados y en práctica dentro de las Fuerzas Armadas que no alteran la naturaleza de las actuales FAR y que no inciden en el desarrollo del presente estudio . Por lo anteriormente expuesto, es necesario abordar este convulso período de la historia de la República de Cuba separándonos suficientemente de los elementos históricos centrales, y acudiendo a los elementos de importancia en lo que a historiografía militar se refiere. Este hecho, sin duda resulta complejo debido a que el período 1956-1959 liga de manera inseparable el devenir de la República de Cuba con el devenir de sus fuerzas rebeldes y las acciones de ésta son indefectiblemente los hechos históricos más importantes de la década de los cincuenta y sesenta en la isla. Para poder aprehender como se produjeron los cambios sobre la estructura guerrillera, es necesario realizar una serie de consideraciones previas; conocimiento del contexto socio económico, acercamiento a la génesis de la fuerza rebelde, comprensión de las bases del éxito de este grupo de hombres armados, el por qué se vieron abocados a convertirse en una fuerza defensiva del sistema que ellos alzaron al poder cuando su génesis era ser un grupo a la ofensiva y de cómo se ensamblaron los reductos de ejército que sirvió bajo el segundo período de gobierno de Fulgencio Batista entre 1952 y 1959 en el nuevo ejército a partir del 1 de enero de 1959 .