Las cubiertas medievales de los templos del sur de Europaprocedimientos de intervención

Resumen

Esta Tesis centra su estudio en las cubiertas de los templos medievales (s.XIII-s.XVI) resueltas mediante azoteas o trasdosados en el Sur de Europa, solución particular que fue posible gracias a, fundamentalmente, la climatología, el comportamiento sísmico del ámbito geográfico donde se utiliza, la disponibilidad y acceso a las materias primas necesarias y la integración de culturas y tradiciones constructivas heredadas presentes en todo el arco del mar Mediterráneo que se ponen de manifiesto con el desarrollo de las diversas etapas de la Reconquista en la Península Ibérica. Tal fue la influencia de esta solución y su fácil integración en el modo de trazar y construir las bóvedas del interior, que se empleó también con profusión en Nueva España y otros territorios del continente americano durante el proceso de colonización y cristianización del mismo. El inventario y análisis realizado refleja esta realidad. Constructivamente, el uso de azoteas como sistema de cobertura de templos medievales constituye una diferencia respecto a los modelos del gótico del centro-norte de Europa o del norte de España, en los que existe una clara diferenciación entre los elementos TECHO (bóvedas de fábrica) y CUBIERTA (de madera, teja u otros materiales). La solución de envolvente superior del edificio que se analiza, que influye en su comportamiento higrotérmico, constructivo, funcional y, también, cultural, provoca que sea frecuente en la actualidad enfrentarse a problemas de conservación o uso, derivados de un mal diseño, resolución o falta de previsión o mantenimiento, generados desde sus inicios o durante las diversas etapas constructivas o de reformas de cada caso concreto. En el caso concreto de la Catedral de Sevilla, que es el modelo analizado, el uso de azoteas sobre las bóvedas de nervaduras de la Catedral de Sevilla como sistema de cobertura es la solución idónea para poder cubrir la gran superficie que posee el edificio gótico. Si bien esta decisión minimiza la fisuración de las bóvedas, se ha de tener gran cuidado en la evacuación de aguas pluviales que fácilmente puede provocar lesiones por absorción o condensación de la misma en la superficie o en el interior de la fábrica, donde el material pétreo utilizado se comprueba que es muy sensible ante los procesos relacionados con la acción de este elemento. Un diseño incorrecto desde los inicios de su construcción o de etapas constructivas posteriores, la falta de mantenimiento preventivo o el mal funcionamiento del mantenimiento correctivo, casi siempre, son las causas de las lesiones producidas. De cara a trabajos de conservación o intervención en estas edificaciones, se genera la necesidad de un protocolo específico para el análisis y diagnóstico de su estado o la verificación de la idoneidad de las intervenciones realizadas, de forma que pueda ofrecerse una solución que vaya más allá de una mera actuación de emergencia con vocación de permanencia, y derive en respuestas integrales eficaces y eficientes. El procedimiento de monitorización que se plantea se convierte en una herramienta fácil de implementar, preventiva, eficaz y de bajo coste. Permite localizar y mostrar gráficamente los lugares afectados y establecer el nivel cualitativo de gravedad del deterioro que es una información importante de cara a la gestión de la financiación de intervenciones y acciones de mantenimiento. Y, sobre todo, se realiza íntegramente mediante Técnicas No Destructivas: fotogrametría, inspección visual y termografía infrarroja. No hace falta “tocar” el edificio, condición inherente a todo Bien Patrimonial, cuestión que, además, es muy útil en estos casos donde es difícil o poco viable medir por contacto la humedad de los plementos de bóvedas en puntos tan poco accesibles por su altura o su geometría.