Estudios de indicadores de aleración y perímetros de vulnerabilidad en la ciudad de Sevilla (España)
Editorial: Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio (Fundación CICOP)
ISBN: 978846123459z
Año de publicación: 2008
Volumen: 1
Páginas: 117-122
Congreso: Congreso Internacional de Rehabilitación del Patrimonio Arquitectónico y Edificación (9. 2008. Sevilla)
Tipo: Aportación congreso
Resumen
En este trabajo se presenta el análisis de los indicadores de alteración en las fachadas de varios templos del centro histórico de Sevilla (España) y su relación con la contaminación atmosférica, principal indicador de alteración en las zonas urbanas. Con este fin, se ha realizado un estudio sistemático de los daños visibles en el exterior de los edificios para evaluar la respuesta de los materiales en función de los diferentes grados de contaminación ambiental. Veintiséis templos, que implican treinta y nueve fachadas, han sido inspeccionados en el Centro Histórico y en Triana, en Sevilla (España). Estas fachadas, construidas con ladrillo y piedra, corresponden a templos edificados desde el Siglo XII al XVIII, localizados en calles con diferentes niveles de tráfico rodado. La ubicación de las fachadas ha sido clasificada en tres categorías en función de su exposición a niveles de contaminación altos, medios o bajos, definidos según los niveles de contaminación correspondientes a las emisiones de tráfico rodado. En total, se han apreciado veinticinco tipos de indicadores de alteración, siendo los más habituales en todas las fachadas analizadas, las incrustaciones y los depósitos superficiales. Las costras negras suponen el cincuenta ocho por ciento de las patologías en las fachadas situadas en zonas con tráfico rodado alto, mientras que este indicador desciende al treinta y cinco y dieciocho por ciento en las portadas situadas en calles con niveles de tránsito de vehículos medio y bajo respectivamente. La diferencia de ubicación de las fachadas, objeto de análisis, es una causa diferencial de la degradación entre ellas. Como consecuencia, la distribución de los contaminantes es esencial para analizar las causas de deterioro en el exterior de los edificios históricos. Por ello, se hace necesario la revisión de los niveles límites de emisión para la protección externa de los monumentos que forman parte de nuestro patrimonio. En este sentido, los planes urbanísticos deberían de tomar medidas tales como el control de tráfico mediante limitación en el número y áreas de restricción, teniendo en cuenta parámetro e indicadores propios y definidos para la prevención del patrimonio arquitectónico.