Asociación entre presencia del virus de la hepatitis C (VHC) en subpoblaciones linfocitarias y la respuesta virológica al tratamiento anti-vhc y evolución de la toxicidad mitocondrial tras tratamiento antirretroviral con un único análogo de nucleósido en pacientes coinfectados VHC-VIH

  1. De Felipe Carrillo, Beatriz
Dirigida por:
  1. Alejandro Vallejo Tiller Director/a
  2. Manuel Leal Noval Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Sevilla

Fecha de defensa: 22 de enero de 2009

Tribunal:
  1. Manuel Megías Guijo Presidente/a
  2. Jerónimo Pachón Díaz Secretario/a
  3. Santiago Moreno Guillén Vocal
  4. Maria Angeles Muñoz Fernandez Vocal
  5. María Nieves Respaldiza Salas Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 187041 DIALNET

Resumen

Se estima que en el mundo existen cinco millones de personas en el mundo que se encuentran coinfectadas por el VHC -VIH. La introducción de del TARGA ha permitido detener el deterioro de la función inmune en pacientes infectados por el VIH. Sin embargo, esta situación ha propiciado el incremento de la morbilidad y de la mortalidad en estos pacientes por enfermedades no relacionadas directamente con la inmunodepresión. De este modo, la enfermedad hepática causada por la infección por VHC, ha emergido como una de las principales causas de muerte entre pacientes coinfectados VHC-VIH. Debido a ello el tratamiento frente al VHC se ha convertido en una prioridad entre este grupo de pacientes. El tratamiento actual frente al VHC en pacientes coinfectados, está basado en la administración de Peg-IFN/RBV durante 48 semanas este tratamiento ha mostrado ser poco eficaz en este grupo de pacientes, sobre todo cuando se encuentran infectado por los genotipos VHC 1 ó 4, mayoritarios entre la población europea. Esto hace necesario conocer factores que puedan predecir la respuesta sostenida al tratamiento actual frente al VHC (Peg-IFN/RBV), a la luz de los resultados obtenidos en nuestro estudio tanto la presencia del VHC en CMN tras la conclusión del tratamiento como niveles altos y/o inconstantes de fármaco durante el tratamiento, podrían ser el factor mejor asociado con la respuesta sostenida al tratamiento. Especulamos que prolongar el tratamiento en aquellos pacientes que tienen detectable el VHC en alguna subpoblación linfocitaria podría favorecer la RVS. Por otra parte, la introducción del TARGA ha sido relacionado con efectos adversos al tratamiento a largo plazo tanto en pacientes monoinfectados por el VIH como en coinfectados VHC-VIH. Reacciones adversas tales como la lipodistrofia y hepatotoxicidad producida por los inhibidores de la proteasa, o acidosis metabólica, pancreatitis, cardiopatías debida a la depleción mitocondrial causada por los análogos de nucleósido, pueden verse agravadas en pacientes coinfectados debido tanto al estrés oxidativo producido por ambos virus como por el tratamiento frente al VHC.Parte de los efectos adversos producidos por el tratamiento TARGA, se ha visto mejorado por la sustitución de los inhibidores de la proteasa por no análogos de nucleósido, sin embargo, la depleción mitocondrial y sus consecuencias (acidosis metabólica, cardiopatías...etc.), en gran parte causadas por los análogos de nucleósido, según refleja los resultados obtenidos en nuestro estudio, no parecen mejorar en un régimen pobre en este tipo de fármacos. Podríamos especular que 48 semanas con este nuevo régimen no es tiempo suficiente para observar un efecto sobre la depleción mitocondrial causada por la administración durante muchos años de análogos de nucleósido y por la propia infección viral.