Relaciones familiares y ajuste en la adolescencia

  1. ALONSO FERNÁNDEZ, MANUELA
unter der Leitung von:
  1. José María Román Sánchez Doktorvater/Doktormutter
  2. Gonzalo Musitu Ochoa Co-Doktorvater

Universität der Verteidigung: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 16 von Dezember von 2005

Gericht:
  1. Anne-Marie Fontaine Präsident/in
  2. María Julia Alonso García Sekretär/in
  3. Ana Paula Relvas Vocal
  4. María Inés Monjas Casares Vocal
  5. Carmen Monreal-Gimeno Vocal

Art: Dissertation

Teseo: 305439 DIALNET

Zusammenfassung

La familia representa bienestar, desarrollo de los hijos y expresión libre de los sentimientos. El apoyo de la familia favorece el desarrollo de los recursos de afrontamiento en la adolescencia. En la adolescencia se inicia la búsqueda de apoyo fuera de la familia. La adolescencia es considerada como un período de transición de la infancia a la juventud en la que el individuo debe hacer frente a numerosos cambios y a su rapidez en producirse. La adolescencia representa un período crítico en el inicio y la experimentación de conductas de riesgo. La familia como sistema de apoyo, ha sido objeto de muchos estudios por la importancia para el bienestar y ajuste de sus miembros. Diana Baumrind (1990), sugiera que existen patrones parentales antecedentes que predicen el inicio y el uso continuado de consumo de drogas en los hijos. Destaca tres estilos parentales: autoritario, permisivo e inductivo. En el autoritario, prevalece el control parental sobre el calor afectivo; en el permisivo, prevalece el afecto sobre el control, y, tanto en uno como en el otro, las conductas de los hijos se relacionan con el uso de las drogas. El inductivo, se constituye como un importante factor protector en el consumo de sustancias. Destaca por el calor, afecto, aceptación, monitorización y disciplina, que parecen muy importantes para promover en los hijos un tipo de autonomía basada en la capacidad de construir relaciones profundas y prevenir conductas de riesgo. Una percepción parental de ausencia de afecto, favorece el consumo de sustancias del hijo. La influencia del grupo de iguales, es uno de los factores más reconocidos por la literatura científica en los comportamientos de riesgo, y en particular, con la experimentación y uso continuado de las drogas. La existencia de conflictos familiares, se relaciona de manera positiva con la existencia de problemas de conducta. Parece que los adolescentes que participan con más frecuencia en conductas delictivas, informan de más problemas de comunicación con sus padres. Aspectos como la depresión, el estrés familiar, la comunicación familiar, el afrontamiento, la autoestima y el apoyo social, son muy importantes en las relaciones familiares (Musitu, 2003). Dentro de este marco teórico, esta tesis de naturaleza correlacional, los instrumentos de medida de las variables se aplicaron a 1308 sujetos- encontró los siguientes resultados: 1. A mayor nivel de funcionamiento familiar, mayor es el grado de ajuste familiar e individual de los adolescentes. 2. El nivel de estrés experimentado por la familia, no es independiente de cómo funciona la familia. 3. La autoestima familiar representa la percepción que el adolescente tiene de su posición familiar. 4. El apoyo del padre y de la madre, son piezas fundamentales sobre las que se apoya el ajuste familiar. 5. Se observa una relación significativa entre el consumo de alcohol y los problemas con el padre. 6. El apoyo familiar es más sensible a los índices de consumo de alcohol y cannabis que los problemas de comunicación familiar. 7. A mayor nivel de estrés familiar, menor nivel de apoyo del padre y de la madre. 8. El apoyo del padre y de la madre, aumenta las relaciones personales. El desajuste, produce estrés, depresión y conductas delictivas.